"Se dice que una persona es libre si goza de completa libertad de pensamiento y de expresión, y su libertad de acción está limitada únicamente por la libertad similar disfrutada por cuantos le rodean. No se comprende generalmente que una persona impelida a la acción por sus pasiones desordenadas, que está a merced de pensamientos inquietos, dominada por prejuicios o sumergida en la ignorancia, sea esclava aunque no esté sometida a coerción externa. La víctima de la bebida, de la glotonería, del libertinaje, de la ira, del orgullo, de los celos, de la lujuria o del odio es esclavo bajo el dominio de amos sin consciencia; cuanto más libre esté de compulsión externa, más esclavizado estará por sus vicios y pasiones. En efecto, la única manera de liberarse de tal esclavitud es verse sometido a autoridad externa que le impida ceder a los más crueles déspotas internos."
Annie Besant
Hacia la sublimación del impulso instintual sexual
a través de la creatividad mística
del hombre acuariano:
Visiones anticipatorias
de El Maestro Tibetano (Djwhal Khul)
“Vivimos hoy en un período de la historia mundial donde tienen lugar tres acontecimientos importantes, que por lo general no son observados ni comprendidos por la mayoría de las personas.
El séptimo rayo de la ley y el orden [el Rayo Violeta, cuyo custodio originario es el maestro ascendido Saint Germain, patrono de esta era] está entrando en manifestación y estamos pasando a un nuevo signo del zodíaco, siendo inminente "la venida del Cristo". Estos tres grandes acontecimientos son la causa de la mayoría de las dificultades y del caos actuales y al mismo tiempo responsables de la orientación universal hacia las realidades espirituales que todos los verdaderos trabajadores actualmente reconocen, de la acrecentada comprensión, de los movimientos de beneficencia y de la tendencia a la colaboración, a la unificación religiosa y al internacionalismo. Los distintos tipos de energía que han estado latentes adquieren hoy mayor potencia. La consiguiente reacción mundial es materialista en sus etapas iniciales, y en sus etapas finales se manifestarán las cualidades divinas y cambiarán la historia y la civilización. El interés demostrado hoy por los llamados rayos cósmicos evidencian el reconocimiento científico de las nuevas energías entrantes del séptimo rayo. Estos rayos que afluyen a través del centro sacro del cuerpo etérico planetario afectan lógicamente los centros sacros de la humanidad, de allí que la vida sexual del género humano está súper excitada momentáneamente, y a ello se debe además, el excesivo énfasis puesto sobre el sexo; también (esto debe recordarse) el agudo impulso que ahora se expresa en forma mental, llevará al hombre en su oportunidad a pensar y solucionar cabalmente el problema del sexo.
La entrada de la era acuariana también estimula en los hombres un espíritu de universalidad y una tendencia hacia la fusión. Ya puede observarse la actual tendencia hacia la síntesis en el comercio, la religión y la política, y también en el impulso hacia la unión, y en otras uniones hacia la comprensión y tolerancia religiosas. Pero estas influencias que actúan sobre los cuerpos sensorios de las personas aún no desarrolladas y excesivamente síquicas, conducen a la morbosa tendencia de unirse lícita o ilícitamente; producen una extrema aptitud para las relaciones sexuales en sus diversas prácticas y las relaciones y fusiones que no están en la línea designada o evolutiva y, frecuentemente, ultrajan las leyes de la naturaleza misma. La energía es algo impersonal y tiene un doble efecto que varía según el tipo de la sustancia sobre la cual actúa.
[…]
El símbolo del sexo expresa también la realidad del amor. En verdad el amor significa relación, pero la palabra amor (igual que la palabra sexo) se utilizan irreflexivamente y sin preocuparse de su verdadero significado. Amor y sexo fundamentalmente son una misma cosa, porque ambos expresan el significado de la Ley de Atracción. Amor es sexo y sexo es amor, porque en ambas palabras están igualmente representadas la relación, la interacción y la unión entre Dios y Su universo, el hombre y Dios, el hombre y su propia alma y entre el hombre y la mujer. Así se pone de relieve el móvil y la relación. Pero el resultado impulsor de esa relación es la creación y la manifestación de la forma a través de la cual la divinidad puede expresarse y llegar a ser. El espíritu y la materia se unieron y vino a la existencia el universo manifestado. El amor es siempre productivo y la Ley de Atracción es fructífera. El hombre y Dios se unieron bajo la misma gran ley y nació el Cristo, demostración y garantía de la realidad de la divinidad humana. El hombre individual y su alma también están tratando de unirse, y cuando esta unión se realice el Cristo nacerá en la caverna del corazón y se verá cómo se acrecienta Su poder en la vida diaria. Por lo tanto, el hombre muere diariamente a fin de que Cristo pueda ser visto en toda Su gloria. El sexo es el símbolo de todas estas maravillas.
También en el hombre tiene lugar el drama del sexo, pues dos veces en su cuerpo, en su personalidad, tiene lugar el proceso de unión y fusión. Me referiré brevemente a ambos acontecimientos simbólicos, a fin de que la admirable historia del sexo pueda ser comprendida por los estudiantes esoteristas en todo su sentido espiritual.
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Primero, las energías que están abajo del diafragma. Sobre el proceso y las reglas para realizarlo no podemos ocuparnos aquí, excepto en un caso, elevar la energía del centro sacro al centro laríngeo, o trasmutar el proceso de reproducción o creación física, en el proceso creador del artista en algún campo de expresión creadora. Mediante la unión de las energías de estos dos centros llegaremos a una etapa evolutiva en la que se tendrán hijos que heredarán nuestra capacidad y mentalidad. Cuando, en otras palabras, haya una verdadera unión de las energías superiores con las inferiores, tendremos el surgimiento de la belleza de la forma, la consagración de algún aspecto de la verdad en una expresión apropiada, enriqueciendo así al mundo. Donde existe esta síntesis empieza a actuar el verdadero artista creador. La garganta, órgano de la Palabra, expresa la vida y manifiesta la gloria y la realidad subyacentes. Tal es el simbolismo que reside detrás de la enseñanza respecto a la fusión de las energías inferiores con las superiores, el sexo en el plano físico es un símbolo. El género humano está siendo cada vez más creador, porque la transfusión de las energías se lleva a cabo de acuerdo a los nuevos impulsos. A medida que se desarrolla el sentido de la pureza en el hombre y se fomenta el desarrollo del sentido de la responsabilidad, y a medida que se acrecienta el amor a la belleza, al color y a las ideas, se acelerará el proceso de elevar lo inferior hasta unirlo a lo superior, entonces se apresurará extraordinariamente el embellecimiento del Templo del Señor.
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Primero, las energías que están abajo del diafragma. Sobre el proceso y las reglas para realizarlo no podemos ocuparnos aquí, excepto en un caso, elevar la energía del centro sacro al centro laríngeo, o trasmutar el proceso de reproducción o creación física, en el proceso creador del artista en algún campo de expresión creadora. Mediante la unión de las energías de estos dos centros llegaremos a una etapa evolutiva en la que se tendrán hijos que heredarán nuestra capacidad y mentalidad. Cuando, en otras palabras, haya una verdadera unión de las energías superiores con las inferiores, tendremos el surgimiento de la belleza de la forma, la consagración de algún aspecto de la verdad en una expresión apropiada, enriqueciendo así al mundo. Donde existe esta síntesis empieza a actuar el verdadero artista creador. La garganta, órgano de la Palabra, expresa la vida y manifiesta la gloria y la realidad subyacentes. Tal es el simbolismo que reside detrás de la enseñanza respecto a la fusión de las energías inferiores con las superiores, el sexo en el plano físico es un símbolo. El género humano está siendo cada vez más creador, porque la transfusión de las energías se lleva a cabo de acuerdo a los nuevos impulsos. A medida que se desarrolla el sentido de la pureza en el hombre y se fomenta el desarrollo del sentido de la responsabilidad, y a medida que se acrecienta el amor a la belleza, al color y a las ideas, se acelerará el proceso de elevar lo inferior hasta unirlo a lo superior, entonces se apresurará extraordinariamente el embellecimiento del Templo del Señor.
En la venidera era acuariana esto avanzará rápidamente. La mayoría de las personas hoy viven abajo del diafragma y dirigen sus energías externamente hacia el mundo material, pervirtiéndolas para fines materialistas. En los siglos venideros esto se corregirá; las energías serán trasmutadas y purificadas y los hombres empezarán a vivir arriba del diafragma. Entonces expresarán los poderes del corazón amoroso, de la garganta creadora y de la voluntad divinamente ordenada por la cabeza. Este es el símbolo del sexo en el plano físico, de la relación que existe entre lo inferior y lo superior.
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La unión de las energías superiores con las inferiores da por resultado el trabajo creador.
La unión de las energías de la personalidad con las del alma, da por resultado el nacimiento del Cristo.
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A medida que el impulso asciende desde el centro sacro al laríngeo, los hombres no se centrarán tan poderosamente en sus impulsos físicos sexuales y manifestarán más conscientemente su expresión creadora. Su vida en el plano físico continuará en forma normal, pero es necesario que comprendan que el modo en que el hombre satisface su naturaleza sexual es anormal y desordenado y estamos en camino de llegar a una normalidad sensata. El deseo del placer egoísta y la satisfacción del impulso animal, que es instintivamente correcto cuando es ordenado, e incorrecto cuando se lo prostituye exclusivamente para el placer, serán reemplazados por la decisión que adopten ambas partes. La decisión satisfará la necesidad natural en forma correcta, conveniente y ordenada. En la actualidad se sacrifica generalmente una de las partes, sea por una indebida abstinencia o un excesivo desenfreno.
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1) El Centro Sacro. Está localizado en la parte inferior de la zona lumbar, siendo muy poderoso, pues controla la vida sexual. Una de las cosas interesantes sobre este centro es que siempre debe seguir siendo un poderoso centro hasta que dos tercios de la humanidad haya recibido la iniciación, porque los procesos procreadores deben continuar y estar activos a fin de proporcionar cuerpos para las almas que nacen. Pero a medida que la raza progresa, este centro será controlado y sus actividades se llevarán a cabo inteligentemente como resultado del conocimiento, de la percepción interna y de los contactos sutiles superiores, y no como resultado del deseo ilimitado e incontrolado, como sucede ahora. No puedo explayarme más sobre esta cuestión, pues el tema es demasiado amplio. Sin embargo, llamaré la atención sobre lo ya escrito, y sugeriré, a quien tenga interés y tiempo, que reúna todo lo dicho en mis libros acerca del tópico del sexo a fin de compaginar un folleto sobre el mismo:
a. El centro sacro corresponde al sol físico, fuente de vitalidad y agente dador de vida en nuestro planeta.
b. El simbolismo del centro sacro se relaciona con el período de gestación antes del nacimiento, y por su correcta comprensión se puede trazar y ampliar la historia de la concepción, de la construcción de la forma, ya sea la forma física de un ser humano, de una idea, una organización erigida alrededor de una verdad central, la forma de un planeta o la de un sistema solar. Quizás por sobre todas las cosas sea el centro a través del cual las fuerzas de la IMPERSONALIDAD oportunamente deberán expresarse y resolverse el problema del dualismo. Esta solución e interpretación del símbolo debe provenir del reino de la mente, controlando con ello la reacción física y ocupándose del propósito y no del deseo. Reflexionen sobre esto, y cuando sea así comprendido, habremos alcanzado entonces esa etapa en que puede tener lugar una gran transferencia al centro más elevado de la creación, el centro laríngeo.
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Quienes estudian la Doctrina Secreta tienen mucho que descubrir acerca de la relación entre los "Señores lunares", los Barhishad Fitris, y el Señor o Ángel solar. El campo de trabajo de los primeros es por excelencia el centro sacro, el del Ángel solar es el centro laríngeo.
e. El centro sacro registra la energía del tercer aspecto de la divinidad, así como el centro plexo solar registra la del segundo aspecto y el centro básico expresa la energía del primer aspecto. Aquí nuevamente tenemos los centros inferiores, reflejando los centros laríngeo, cardíaco y coronario, completando así las manifestaciones superior e inferior de la divina Trinidad en el hombre. Este centro fue llevado a una plena actividad funcionante en la antigua Lemuria, la primera raza humana; su energía es la del Espíritu Santo, influyendo a la sustancia virgen...
Oportunamente, en el Divino Hermafrodita (que aparecerá más tarde), tendremos otra combinación...
Nuevamente observarán cómo la Ciencia de los Triángulos rige la estructura humana en todos sus aspectos, y también la de un sistema solar. Esto es de esperarse.
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1) …Cuando el Hombre celestial, que en la actualidad se manifiesta por medio del esquema de la Tierra, consiga vitalizar Su centro medio o apartar la fuerza del Kundalini planetario de los centros inferiores, llevándola al plexo solar, se habrá alcanzado un nuevo ciclo, y cesará gran parte del malestar actual. Su trabajo es todavía embrionario; transcurrirán otros dos ciclos y medio antes de que El pueda realizar el trabajo necesario. Una vez realizado, el resultado en relación con los entes humanos, será triple:
· El estímulo sexual, tal como hoy se entiende, tenderá a manifestarse como creación, no tanto en el plano físico sino más bien en el astral y en el mental, expresándose en creaciones de arte y de belleza y en el trabajo objetivo de los científicos.
· El crimen, tal como hoy lo vemos, originado en gran parte por la pasión sexual, será cosa del pasado; el libertinaje en el plano físico, las orgías y los horrores consiguientes, se reducirán por lo menos en un setenta y cinco por ciento.
· La interacción de los tres planetas físicos densos, se perfeccionará y el hombre podrá pasar de uno a otro a voluntad. (3-261).
2) Como se observará, el hombre trabajará como un creador en los tres mundos de la actividad humana y seguirá un procedimiento análogo. Sus formas mentales serán construidas con materia mental, elegida específicamente, pues posee el mismo grado de vibración que la Idea que trata de personificarse; dichas formas persistirán -como lo hace la forma mental logoica, el sistema solar- durante todo el tiempo que el factor Voluntad o vitalidad dinámica, las mantenga continuamente unidas...”
Texto extraído de El sexo, por Djwhal Khul (El Maestro Tibetano), en la versión (telepática) redactada por Alice A. Bailey, entre otros muchos escritos que comenzaron a ver la luz escritural a partir de 1919. Se han tomado fragmentos sucesivos de las secciones El problema del sexo, Los chakras y la energía sexual y Correspondencias cósmicas al impulso sexual. Sitio de edición digital: http://hermandadblanca.org.
El video es el quinto de la serie A journey through the chakra system with sound and light (Un viaje a través del sistema de chakras con sonido y luz), propiedad de 12SoundSolutions.com. (Toda persona familiarizada con la armonización de sus chakras, y acaso también con el trabajo energético del kundalini, podrá comprobar la asombrosa eficacia de esta sesión con cuenco tibetano de cristal.)
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